Informe de resultados: por que realizar una evaluación del Programa IILA-SICA
La integración regional, a partir de la Europea, que con sus más de 50 años representa una de las expresiones más vastas y articuladas, está obviamente construida por un constante dialogo entre la institución regional y las instituciones de cada País miembro.
Justamente por el proceso de integración europea, la fuerte consistencia y la articulación alcanzadas por las instituciones comunitarias se ha subrayado la evidente brecha de “cultura de la integración” entre los funcionarios centrales y aquellos nacionales, poniendo en muchos países un claro problema de adecuación en la formación de cuadros dirigentes.
Por haber vivido en primer plano la necesidad de adecuación de sus propios recursos humanos, la cooperación italiana ha hecho de su aporte a los procesos de integración en América Latina un objetivo específico, allí donde se han creado las condiciones de específica colaboración a tales procesos de integración regional.
Por lo tanto, ya sea en el MERCOSUR, ya sea sucesivamente en el SICA, la cooperación italiana se ha dirigido a los cuadros dirigentes de los Países miembros, más que a los funcionarios de las nuevas instituciones regionales. El abordaje es entonces apuntar a una mayor extensión de la cultura de la integración, saliendo lo más posible de su “templo” delegado para aumentar el número de los “seguidores” en cada una de las realidades nacionales.
Por ello, antes de todo este proceso de difusión de la cultura de la integración, se empieza juntando a funcionarios de los diferentes países, que sin embargo abordan, por lo menos a nivel nacional, la misma temática, como puede ser energía y medio ambiente, seguridad y justicia, políticas de integración regional, entre otras.
En términos “horizontales”, es decir, entre instituciones análogas de diferentes países, se genera de hecho una confrontación entre modalidades, metodologías, legislaciones y praxis locales, que deben crear puntos de convergencia y adecuación hasta integrarse. En términos “verticales”, es decir, entre la institución regional y los funcionarios de los países, la confrontación es didáctico-experimental, y por lo tanto los Cursos de Alta Formación tienen una amplia participación no solamente de formadores, sino también de funcionarios dirigentes de la institución regional que, en este caso, es el SICA.
En tal sentido, el Programa IILA-SICA de Alta Formación de Cuadros Dirigentes ha abordado, a partir de 2009 y hasta noviembre de 2012 (periodo evaluado en el Informe), una pluralidad de aspectos del más amplio proceso de capacitación a la integración regional en Centroamérica y apunta ahora, con el presente informe, a examinar todos los resultados obtenidos, haciendo también una evaluación general – en términos cuantitativos y cualitativos – y algunas reflexiones sobre recomendaciones y lecciones aprendidas.
Se espera así contribuir a la definición de criterios e indicadores de resultados para la realización de experiencias exitosas de formación para la integración regional.